jueves, 31 de octubre de 2013

Adolf Hitler

Máximo dirigente de la Alemania nazi (Braunau, Bohemia, 1889 - Berlín, 1945). Hijo de un aduanero austriaco, su infancia transcurrió en Linz y su juventud en Viena. La formación de Adolf Hitler fue escasa y autodidacta, pues apenas recibió educación. En Viena (1907-13) fracasó en su vocación de pintor, malvivió como vagabundo y vio crecer sus prejuicios racistas ante el espectáculo de una ciudad cosmopolita, cuya vitalidad intelectual y multicultural le era por completo incomprensible.
De esa época data su conversión al nacionalismo germánico y al antisemitismo. En 1913 Adolf Hitler huyó del Imperio Austro-Húngaro para no prestar servicio militar; se refugió en Múnich y se enroló en el ejército alemán durante la Primera Guerra Mundial (1914-18). La derrota le hizo pasar a la política, enarbolando un ideario de reacción nacionalista, marcado por el rechazo del nuevo régimen democrático de la República de Weimar, a cuyos políticos acusaba de haber traicionado a Alemania aceptando las humillantes condiciones de paz del Tratado de Versalles (1918).
De vuelta a Múnich, Hitler ingresó en un pequeño partido ultraderechista, del que pronto se convertiría en dirigente principal, rebautizándolo como Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes (NSDAP). Dicho partido se declaraba nacionalista, antisemita, anticomunista, antisocialista, antiliberal, antidemócrata, antipacifista y anticapitalista, aunque este último componente revolucionario de carácter social quedaría pronto en el olvido; este abigarrado conglomerado ideológico, fundamentalmente negativo, se alimentaba de los temores de las clases medias alemanas ante las incertidumbres del mundo moderno. Influenciado por el fascismo de Mussolini, este movimiento, adverso tanto a lo existente como a toda tendencia de progreso, representaba la respuesta reaccionaria a la crisis del Estado liberal que la guerra había acelerado.
Sin embargo, Hitler tardaría en hacer oír su propaganda. En 1923 fracasó en un primer intento de tomar el poder desde Múnich, apoyándose en las milicias armadas de Ludendorff («Putsch de la Cervecería»). Fue detenido, juzgado y encarcelado, aunque tan sólo pasó en la cárcel un año y medio, tiempo que aprovechó para plasmar sus estrafalarias ideas políticas en un libro que tituló Mi lucha y que diseñaba las grandes líneas de su actuación posterior.
De nuevo en libertad desde 1925, Hitler reconstituyó el NSDAP expulsando a los posibles rivales y se rodeó de un grupo de colaboradores fieles como Goering,Himmler y Goebbels. La profunda crisis económica desatada desde 1929 y las dificultades políticas de la República de Weimar le proporcionaron una audiencia creciente entre las legiones de parados y descontentos dispuestos a escuchar su propaganda demagógica, envuelta en una parafernalia de desfiles, banderas, himnos y uniformes.
Combinando hábilmente la lucha política legal con el uso ilegítimo de la violencia en las calles, los nacionalsocialistas o nazis fueron ganando peso electoral hasta que Hitler -que nunca había obtenido mayoría- se hizo confiar el gobierno por el presidente Hindenburg en 1933.
Desde la Cancillería, Hitler destruyó el régimen constitucional y lo sustituyó por una dictadura de partido único basada en su poder personal. El TercerReich así creado fue un régimen totalitario basado en un nacionalismo exacerbado y en un complejo de superioridad racial sin fundamento científico alguno (basado en estereotipos que contrastaban con la ridícula figura del propio Hitler).
Tras la muerte de Hindenburg, Hitler se hizo nombrarFührer o «caudillo» de Alemania y se hizo prestar juramento por el ejército. La sangrienta represión contra los disidentes culminó en la purga de las propias filas nazis durante la «Noche de los Cuchillos Largos» (1934) y la instauración de un control policial total de la sociedad, mientras que la persecución contra los judíos, iniciada con las racistas Leyes de Núremberg (1935) y con el pogromo conocido como la «Noche de los Cristales Rotos» (1938) culminó con el exterminio sistemático de los judíos europeos a partir de 1939 (la «Solución Final»).La política internacional de Hitler fue la clave de su prometida reconstitución de Alemania, basada en desviar la atención de los conflictos internos hacia una acción exterior agresiva. Se alineó con la dictadura fascista italiana, con la que intervino en auxilio de Franco en la Guerra Civil española (1936-39), ensayo general para la posterior contienda mundial; y completó sus alianzas con la incorporación del Japón en una alianza antisoviética (Pacto Antikomintern, 1936) hasta formar el Eje Berlín-Roma-Tokyo (1937).
Militarista convencido, Hitler empezó por rearmar al país para hacer respetar sus demandas por la fuerza (restauración del servicio militar obligatorio en 1935, remilitarización de Renania en 1936); con ello reactivó la industria alemana, redujo el paro y prácticamente superó la depresión económica que le había llevado al poder.
Luego, apoyándose en el ideal pangermanista, reclamó la unión de todos los territorios de habla alemana: primero se retiró de la Sociedad de Naciones, rechazando sus métodos de arbitraje pacífico (1933); luego forzó el asesinato de Dollfuss (1934) y el Anschluss o anexión de Austria (1938); a continuación invadió la región checa de los Sudetes y, tras engañar a la diplomacia occidental prometiendo no tener más ambiciones (Conferencia de Múnich, 1938), ocupó el resto de Checoslovaquia, la dividió en dos y la sometió a un protectorado; aún se permitió arrebatar a Lituania el territorio de Memel (1939).
Pero, cuando el conflicto en torno a la ciudad libre de Danzig le llevó a invadir Polonia, Francia y Gran Bretaña reaccionaron y estalló la Segunda Guerra Mundial (1939-45). Hitler había preparado sus fuerzas para esta gran confrontación, que según él habría de permitir la expansión de Alemania hasta lograr la hegemonía mundial (Protocolo Hossbach, 1937); en previsión del estallido bélico había reforzado su alianza con Italia (Pacto de Acero, 1939) y, sobre todo, había concluido un Pacto de no-agresión con la Unión Soviética (1939), acordando con Stalin el reparto de Polonia.
El moderno ejército que había preparado obtuvo brillantes victorias en todos los frentes durante los primeros años de la guerra, haciendo a Hitler dueño de casi toda Europa mediante una «guerra relámpago»: ocupó Dinamarca, Noruega, Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Francia, Yugoslavia, Grecia. (mientras que Italia, España, Hungría, Rumania, Bulgaria y Finlandia eran sus aliadas, y países como Suecia y Suiza declaraban una neutralidad benévola).

La salud mental de Hitler

Algunos de los episodios más vergonzosos de la historia de la humanidad tuvieron lugar en el siglo XX. El conocido como holocausto judío, el intento de aniquilar totalmente a la población judía de Europa (se logró con “sólo” 6 millones de judíos) fue organizado por el comandante en jefe de las SS Heinrich Himmler y ejecutado por el teniente coronel de las SS Adolf Eichmann. Pero fue Adolf Hitler quien promovió e incentivó ideo lógicamente esas matanzas, que además incluyeron a otros colectivos como negros, polacos, gitanos, homosexuales y comunistas.
No cabe duda de que Hitler no podía haber llevado a cabo sus planes sin la ayuda de todos sus colaboradores y sin el poderío y la obediencia de su ejército, pero también es cierto que el comportamiento que demostró hace dudar de su salud mental. Hace poco se ha conocido un estudio que el Servicio de Inteligencia Británica realizó en el año 1942, con el que pretendían entender los aspectos psicológicos de su comportamiento. El responsable del estudio, Mark Abrams, un científico social posteriormente conocido por las investigaciones de mercado, realizó el análisis psicológico de un discurso dado por Hitler el 26 de abril de 1942.
Las conclusiones de Abrams fueron claras: Hitler tenía delirios paranoicos (ideas recurrentes e inevitables, sin base suficiente pero con apariencia de verosimilitud y vividas como reales por la propia persona), en los que veía a los judíos como encarnación del Diablo y culpables de todos los males de la humanidad. Y creía que él mismo era la encarnación del espíritu de Dios, una especie de mesías salvador. Además, en el discurso se podía identificar síntomas de histeria, epilepsia y paranoia, junto con cierta sensación de confusión y de miedo a la derrota en su cruzada contra los judíos.

viernes, 4 de octubre de 2013

Masacre de Katyn





     La Masacre de Katyn también conocida como la masacre del Bosque de Katyn, fue una ejecución en masa llevada a cabo durante la Segunda Guerra Mundial hacia oficiales del ejército, intelectuales, policías y civiles polacos acusados de espionaje y subversión por el Comisariado del Pueblo para Asuntos Internos (NKVD) —la policía secreta soviética dirigida por Lavrentiy Beria— entre abril y mayo de 1940 luego de la rendición de Polonia ante la Alemania nazi. A través de un pedido oficial de Beria, fechado el 5 de marzo de 1940, Iósif Stalin y otros cuatro miembros del Politburó soviético aprobaron el genocidio. El número de víctimas es calculado en cerca de 22 000, siendo 21 768 el número de cadáveres identificados.1 Las víctimas fueron ejecutadas en el bosque de Katyn —en la actual Rusia— y, dentro de prisiones en las ciudades de Kalinin, Járkov y otros lugares próximos. Del total de muertos, cerca de ocho mil eran militares prisioneros de guerra, otros seis mil eran policías y el resto es dividido entre civiles integrantes de la intelectualidad polaca —profesores, artistas, investigadores e historiadores— presos bajo la acusación de ser saboteadores, espías, terratenientes, dueños de fábricas, abogados, funcionarios públicos peligrosos y sacerdotes cristianos.
Originalmente, el término «Masacre de Katyń» se refería exclusivamente a las muertes en el bosque de Katyń —cerca de los poblados de Gnezdovo y Katyń y, a 19.5 km al oeste de Smolensk— de los oficiales del ejército polaco que fueron presos del campo de prisioneros de guerra de Kozelsk. Esta fue la mayor de las ejecuciones simultáneas que se le realizaron a los prisioneros polacos.

Descubrimiento

     El descubrimiento de las tumbas masivas por parte del oficial de la Wehrmacht (ejército alemán), Rudolf Christoph Freiherr von Gersdorff en unos bosques de Gneizdovo cercanos a la autopista que conduce a Smolensk en abril de 1943 condujo a la ruptura de las relaciones entre el gobierno polaco en el exilio, con sede en Londres, y la Unión Soviética.
Después de que las fuerzas de Heinz Guderian pasaran por el sector en julio de 1941 y aseguraran la zona de Smolensk, los bosques fueron revisados en busca de partisanos pero no se hallaron las tumbas. En 1942 miembros de la Organización Todt que trabajaban en el sector de la autopista fueron alertadas por un campesino de que en unos bosques había unas tumbas. Los prisioneros-esclavos dejaron una gran cruz de abedul en el lugar y el hecho pasó al olvido; sin embargo, una jauría de lobos comenzó a asolar la zona y el mando alemán destinó un destacamento para su eliminación internándose en los bosques de Katyn. Estos encontraron la gran cruz de abedul y una gran cantidad de huesos asomándose a flor del suelo, un médico forense los identificó como huesos humanos, al hurgar en la zona se encontró con que se trataba de una gran tumba colectiva. Esto hizo que la Cruz Roja Polaca interviniera en el lugar con el permiso del gobierno nazi y se estableciera que se trataba de alrededor de 4.143 oficiales del ejército polaco dados por desaparecidos durante la ocupación soviética de la zona. Se invitó a oficiales de los aliados y otros testigos para dejar testimonio de la autoría de los atentados que indicaban a los soviéticos. El gobierno inglés, por su parte, afirmó la culpabilidad del régimen nazi propugnando que se trataba de un montaje para desviar todas las culpabilidades a la URSS.
     La masacre fue empleada profusamente con fines propagandísticos por el Ministerio de Propaganda del régimen nazi, anunciando su descubrimiento el 13 de abril de 1943, mientras que la URSS culpaba a las SS en Berlín de la autoría.
     En principio la expresión se refiere a la masacre de los oficiales polacos confinados en el campo de prisioneros de guerra de Kozielsk4 en el bosque deKatyn, cerca del pueblo de Gnezdovo, a poca distancia de Smolensk, en la Unión Soviética. Más recientemente la frase se ha venido asociando a la muerte de unos 22.000 ciudadanos polacos, prisioneros de guerra de los campos de Ostashkov, Kozielsk y Starobielsk y presos de las cárceles del oeste deBielorrusia y Ucrania, asesinados por orden de Stalin en el bosque de Katyn y las prisiones de Kalinin, Járkov y otras ciudades soviéticas.

Trasfondo

     Muchos polacos habían sido hechos prisioneros de guerra tras la invasión y la derrota de Polonia por los nazis y la Unión Soviética a partir del 1 de septiembre de 1939, una semana después de la firma del pacto secreto Pacto Molotov-Ribbentrop o pacto entre Hitler y Stalin. Numerosos campos de prisioneros fueron usados para el internamiento de los polacos capturados, incluyendo los campos de Ostashkov, Kozielsk y Starobielsk. Los dos últimos se destinaron principalmente a oficiales, mientras que Ostashkov albergó, sobre todo, exploradores, policías y funcionarios de prisiones. En algunas zonas de ejecutó también a políticos disidentes soviéticos.
     El 5 de marzo de 1940, de acuerdo con una nota para Stalin preparada por Lavrenty Beria,5 miembros delpolitburó soviético —Stalin, Vyacheslav Molotov, Lázar Kaganóvich, Mijaíl Kalinin, Kliment Voroshílov y Beria— firmaron una orden de ejecución de activistas «nacionalistas y contrarrevolucionarios» detenidos en campos y prisiones de la parte oeste ocupada de Ucrania y Bielorrusia. Esto provocó el asesinato de unos 22.000 ciudadanos polacos, incluyendo unos 15.0006prisioneros de guerra. La extensa definición de «acusado» incluyó un número significativo de miembros de la inteligencia polaca además de policías, reservistas y oficiales militares en activo.
     El descubrimiento de la masacre precipitó la ruptura de las relaciones diplomáticas entre la Unión Soviética y el gobierno polaco en el exilio en Londres en 1943. La Unión Soviética negó las acusaciones hasta 1990, cuando el gobierno de Boris Yeltsin reconoció que el NKVD fue responsable de la matanza y su encubrimiento y entregó los documentos desclasificados.

Ejecución Masiva

     El 19 de septiembre de 1939, el Comisario de Seguridad del Estado de primer rango, Lavrentri Pavlovich Beria(el comisario popular para asuntos internos), siguiendo órdenes de Stalin, llamó al Consejo del NKVD de laURSS para prisioneros de guerra e internos (dirigido por el Capitán de la Seguridad del Estado, Pyotr K. Sopruneko) y ordenó establecer campos para los prisioneros polacos. Fueron: Jukhnovo (estación de tren de Babynino), Yuzhe (Talitsy), Kozelsk, Kizelshchyna, Oranki, Ostashkov (Isla Stolbny en el lago Seliger, cerca de Ostashkov), Putyvli (estación de Tetkino), Starobielsk, Vologod (estación de Zaenikevo) y el campo de Gryazovets.
     En el período entre el 3 de abril y el 19 de mayo de 1940, alrededor de 22.000 prisioneros de guerra y prisioneros comunes fueron asesinados. Cerca de 6.000 prisioneros de guerra del campo de Ostashkov, unos 4.000 del campo de Starobielsk, 4.500 del campo de Kozielsk y 7.000 prisioneros de la parte oeste de Bielorrusia y Ucrania.
     Solo 395 prisioneros fueron salvados de la matanza. Fueron sacados de los campos de Yuknov y llevados a Gryazovets. Fueron los únicos que escaparon de la muerte.
     Si bien los alemanes negaron conocer esta masacre hasta 1943, un informe británico de la Oficina de Relaciones Exteriores de la postguerra llega a sugerir que la matanza fue realizada por sugerencia o bajo complicidad alemana.

Metodología

     Kaczynski murió tres años después en un accidente de avión cuando se dirigía a conmemorar los sucesos.
     Hasta el 99% de los prisioneros restantes fueron asesinados posteriormente. Las personas de Kozielsk lo fueron en el lugar habitual de ejecuciones en masa de Smolensko, llamado el bosque de Katyn. Las de Starobielsk, dentro de la prisión del NKVD de Járkov y los cuerpos fueron enterrados cerca de Pyatikhatki. Los oficiales de policía de Ostashkov fueron asesinados en la prisión del NKVD de Kalinin (Tver) y enterrados en Miednoje.
     Durante la vista de Dimitrii S. Tokarev, anterior jefe de la Junta del Distrito del NKVD en Kalinin, se ofreció información detallada acerca de las ejecuciones en la prisión del NKVD de Kalinin.
     De acuerdo con Tokarev, los fusilamientos empezaban por la tarde y terminaban al amanecer. El primer transporte, el 4 de abril de 1940, trajo 390 personas, y los verdugos se encontraron con un trabajo duro por tener que matar a tantas personas en una sola noche. Los siguientes transportes no trajeron más de 250 personas. Las ejecuciones fueron realizadas con pistolas Walther PPK y municiones de fabricación alemana suministradas por Moscú. La idea era culpar al régimen nazi de las ejecuciones en el futuro.
     Las ejecuciones fueron metódicas. Después de revisar la información personal del condenado, éste era esposado y llevado a una celda aislada. Los sonidos de las ejecuciones eran enmascarados con máquinas ruidosas (tal vez ventiladores) durante la noche. Tras ser metida en la celda, se disparaba inmediatamente a la nuca de la víctima. Su cuerpo era sacado por la puerta de enfrente y depositado en uno de los cinco o seis vagones que esperaban, de donde era cogido el siguiente condenado. El procedimiento se desarrollaba cada noche, excepto en la fiesta del 1 de mayo.
     Cerca de Smolensk, los polacos, con las manos atadas a la espalda, eran conducidos a las fosas y matados con un tiro en la nuca. Los cuerpos fueron enterrados en forma de pilas de 5 filas de 500 cadáveres y a muchos no se les quitó el uniforme ni las pertenencias, las pilas fueron cubiertas con una capa de 3 m de tierra. Entre los muertos, se encontraron desde almirantes, generales hasta incluso a capellanes.

Apoyo a la versión soviética

     Un gran número de historiadores, juristas, políticos y publicistas hoy en día se acogen a la versión oficial soviética. En particular, los historiadores Yuri Zhukov y Aleksandr Kolesnik9 apoyan y exponen argumentos sobre la no responsabilidad del lado soviético. Conocidos partidarios de la versión soviética son: el vicepresidente del Comité de la Duma Estatal para asuntos constitucionales y de la construcción, miembro de la fracción del Partido Comunista de la Federación Rusa (PKFR) V. I. Ilyujin;10 el líder de la fracción «Gran Rusia» (Velikaya Rossia) A. N. Savelyev,11 los publicistas A. B. Shirokorad y Yu. Mujin, los politólogos V. N. Shved y S. E. Strygin, así como el Ph. D. en ciencias históricas Yu. M. Slobodkin.
     Los partidarios de la versión soviética en particular afirman que la ejecución de los polacos fue una acción planificada de exterminio de la aristocracia polaca y de los judíos polacos por parte de los alemanes en 1941. Parte de dicha acción fue la llamada «Masacre de los profesores de Leópolis» (1941), reconocida como delito de las tropas de ocupación alemanas. De otro lado, si la ejecución de los polacos hubiera sido perpetrada por el Comisariado del pueblo para asuntos internos (NKVD), este asunto hubiera sido utilizado de manera inmediata por Nikita Jrushchov en el XX Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) para la desmitificación del culto a la personalidad de Stalin. Aseveran también que los documentos descubiertos en 1990 y luego publicados oficialmente en 2010 son falsos y que fueron fabricados por fuerzas enemigas de la URSS con el objeto de desacreditar al Estado de los sóviets.
     El 19 de abril de 2010, en la Duma Estatal el PKFR organizó una mesa redonda sobre el tema «Katyn – aspectos jurídicos y políticos». En este acto participaron los más importantes partidarios de la versión soviética de la masacre de Katyn. Como resultado del trabajo realizado se redactó una carta al presidente de Rusia Dmitri Medvédev, en la cual se declara que «el contenido y la circunstancias del hallazgo de los principales documentos sobre los cuales se construye la versión 'polaca', ponen en duda su verdadera autenticidad, y dan fundadas razones para hablar de una falsificación, por parte de A. N. Yakovlev, D. A. Volkogonov y otros funcionarios de alto rango gubernamental y partidista, de hechos históricos asociados a la tragedia de Katyn».
     En junio de 2010 Viktor Ilyujin declaró 12 que ha podido recaudar pruebas de la falsificación de algunos documentos
claves sobre la masacre de Katyn, en particular de la carta de Lavrenti Beria N° 794/B y de la nota de Shelepin a Jrushchov del 3 de marzo de 1959. Según su información, en la creación de estos documentos estuvieron involucrados el ex director del Archivo Estatal Ruso R. G. Pijoy, el ministro de prensa e información de Rusia M. N. Poltoranin y el primer vicedirector de la Agencia de Seguridad del presidente de Rusia G. G. Rogozin.

Jan Nowak Jezioranski

     Zdzisław Jeziorański nació en Berlín. Tras finalizar sus estudios de económicas en 1936 continuó trabajando allí como ayudante en la Universidad de Poznań. Movilizado en 1939, lucho en la armada polaca como artillero NCO. Fue tomado como prisionero de guerra por los alemanes en Volinia, pero logró escapar y regresó a Varsovia. Muchos de sus compañeros fueron tomados como prisioneros de guerra por los soviéticos y posteriormente asesinados en la Masacre de Katyn.
     Rápidamente se alistó en la resistencia polaca. Después de 1940 se convirtió en el principal organizador de Akcja N, una organización secreta que preparaba periódicos en alemán y otro material de propaganda que se hacía pasar por publicaciones oficiales de Alemania, para proseguir la guerra psicológica contra las tropas alemanas.
     Sirvió también como enviado entre los comandantes del ejército polaco y el gobierno de Polonia en el exilio y otros gobiernos aliados. Durante sus primeros viajes a Suecia y Gran Bretaña informó a los gobiernos del oeste del destino de Polonia bajo las ocupaciones alemana y soviética. Además, fue el primero en informar del levantamiento del gueto de Varsovia. Durante una de sus misiones, en julio de 1944, volvió a Varsovia solo unos días antes del inicio del levantamiento de Varsovia.
     Durante el levantamiento tomó parte activamente en la lucha contra los alemanes y organizó además la radio polaca que mantenía el contacto con los países aliados con emisiones diarias en polaco e inglés. Poco antes de la capitulación de la capital polaca, recibió la orden del comandante en jefe de la armada, Tadeusz Bór-Komorowski de dejar la ciudad y acudir a Londres. Logró evitar ser capturado y alcanzó Gran Bretaña, llevando consigo gran cantidad de documentos y fotografías. Por su valentía y sus viajes a través de la Europa ocupada por los alemanes, fue condecorado con la máxima condecoración militar polaca, la Virtuti Militari.Tras la guerra, Jan Nowak-Jeziorański permaneció en el oeste, primero en Londres y después en Múnich Washington D.C. Entre 1948 y 1976 fue una de las personalidades más notables de la división polaca de la agencia de radio de la BBC. En 1952 se convirtió además en director de la sección polaca de la Radio Free Europe. A través de sus emisiones diarias, permaneció como una de las personalidades más populares de la radio, tanto en la Polonia ocupada por los comunistas como entre los polacos de la diáspora en el oeste. Tras dejar sus puestos en 1976, se convirtió en uno de los miembros más prominentes del Congreso de americanos polacos y dirigió la organización entre 1979 y 1996. Trabajó como consejero de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense y de los presidentes de los Estados Unidos Ronald Reagan y Jimmy Carter. Fue uno de los propulsores de la entrada de Polonia en la OTAN a través de sus numerosos contactos con políticos estadounidenses, lo que se logró en 1999.
     En los 1990 empezó su cooperación con la Radio polaca y escribió una serie de emisiones tituladas Polska zoddali (Polonia desde la distancia). Desde 1990 estuvo presente además en la Televisión polaca como autor de programas mensuales. En julio de 2002 volvió a Varsovia para quedarse. Fue un partidario activo de la entrada de Polonia en la Unión Europea. Muchos de sus libros, publicados en el extranjero y en la propia Polonia tras 1989, fueron bestsellers y le reportaron más popularidad.
     Fue galardonado con algunos de los más prestigiosos premios literarios polacos por sus escritos, incluyendo el Premio Kisiel (1999), Premio en memoria Ksawery Pruszyński del Pen-club polaco (2001) y el premio Superwiktor para personalidades de televisión. En 2003 fue también galardonado con el premio Człowiek Pojednania por el Consejo polaco de cristianos y judíos, por su mediación en el diálogo polaco-judío. Finalmente, fue investido Doctor honoris causa por varias universidades polacas, entre ellas la Universidad de Varsovia, la Universidad Jagellónica y su alma mater, la Universidad de Poznań.
     Murió en Varsovia, el 20 de enero de 2005. Ha donado todos sus archivos al instituto Ossolińskich.

Józef Piłsudski

     Józef Piłsudski de Kościesza (Zułów, cerca de VilnaLituania5 de diciembre de 1867 - Varsovia12 de mayo de 1935) fue el primer Jefe de Estado (1918-1922), "Primer Mariscal" (desde 1920) y dictador (1926-1935) de la Segunda república polaca. Desde la Primera Guerra Mundial tuvo un gran influencia en la sociedad de su país y fue un político muy relevante en la política europea. Es considerado el principal responsable de que Polonia consiguiera la independencia en 1918 tras 123 años de particiones.




Masacre de Polacos en Volinia

     La Masacre de Polacos en Volinia es una limpieza étnica realizada en Volinia durante la Segunda Guerra Mundial. Durante el curso de la guerra, se estima que sobre 80.000 polacos fueron masacrados por el Ejército Insurgente Ucraniano (Ukrainska Povstanska Armiya, o UPA) y otros grupos armados. Esto ocurrió en 1943 y 1944 en Volinia (hoy Ucrania), y la mayoría de las muertes ocurrieron en el verano y otoño de 1943.
     Polonia recobró la independencia tras la Primera Guerra Mundial, . El gobierno polaco de Józef Piłsudski había apoyado con fuerza la idea de una Ucrania independiente como estado más o menos subordinado que sirviera como mínimo de tapón frente a los soviéticos. El ejército polaco y las fuerzas de la República Popular Ucraniana lucharon contra el Ejército Rojo bolchevique al precio de ceder a Polonia la proclamada independiente República Nacional de Ucrania Occidental y sometida a la fuerza por los polacos. Al final de la Guerra Polaco-Soviética de 1920-1921, esta alianza fue rota con la firma de la Paz de Riga, finalizando el apoyo polaco a la independencia ucraniana pero incorporando territorios de población ucraniana a Polonia. Como consecuencia de la Paz de Riga, entre ambas guerras mundiales, Volinia y otras zonas de población ucraniana quedan bajo administración polaca con el nombre de Voivodato de Volinia (1921-1939).